Seguro has escuchado hablar de inteligencia emocional, pero, ¿sabes realmente cómo funciona y para qué sirve? Conoce algunas claves que te ayudarán a comprenderlo.
La inteligencia emocional es más que un término de moda, es una actitud frente a la vida. Por medio de ella obtenemos la capacidad de percibir, expresar y manejar nuestras emociones.
Así como a nuestros músculos, los procesos internos del pensamiento también pueden ejercitarse para establecer hábitos cognitivos que nos ayuden a tener un mejor desarrollo social.
Para que puedas conocer cuánto de tu inteligencia emocional necesitas reforzar, te dejamos esta lista:
1. Tomar todo como algo personal
Cada persona tiene una perspectiva diferente de las cosas, es normal que en momentos las opiniones choquen, sin que esto represente una agresión que deba llevarse al plano fuera del que se produjo. No todo se trata de nosotros.
Llevar todo al plano personal es indicio de poca inteligencia emocional.
2. Capacidad de virar el timón.
Una persona con madurez emocional es capaz de afrontar las situaciones difíciles como desafíos.
3. Modificar conductas emocionales
Cuando se logra reconocer las emociones y gestionarlas activando el nivel de regulación se tiene mayor capacidad de lidiar con la incertidumbre, eso lo permite un alto nivel de inteligencia emocional.
4. Practicar la empatía
Pensar en los demás le permite conectarse también con usted mismo, escuchar las experiencias de su entorno sin juzgar es parte de la experiencia de gestión de los sentimientos.
Si deseas desarrollar más capacidades cognitivas como estas puedes escribirnos por esta vía o en cualquiera de nuestras redes sociales, como Mi educación emocional.
Comentarios
Publicar un comentario